El Gobierno impidió el 5 de marzo llevar a los hospitales a los ancianos contagiados en residencias.
Un documento de Sanidad no pedía la preparación de unidades sanitarias especializadas dentro de los geriátricos, sino que reclamaba el confinamiento en sus cuartos.
Un documento de Sanidad no pedía la preparación de unidades sanitarias especializadas dentro de los geriátricos, sino que reclamaba el confinamiento en sus cuartos.
Sanidad confinó a los ancianos y los trató como foco de infección.
Las muertes en residencias equivaldrían a un 66,3% del total notificado oficialmente por el ministerio de Sanidad.
Las muertes en residencias equivaldrían a un 66,3% del total notificado oficialmente por el ministerio de Sanidad.