RAFAEL ARÉVALO MARTINEZ (1914)...

RAFAEL ARÉVALO MARTINEZ (1914)

Le besé la mano y olía a jabón:
yo llevé la mía contra el corazón.
Le besé la mano breve y delicada
y la boca mía quedó perfumada.

muchachita limpia, quien a ti se atreva,
que como tus manos huela a ropa nueva.

¡Besé sus cabellos de crencha ondulada:
si también olían a ropa lavada!

¿A qué linfa llevas tu cuerpo y tu ropa?
¿En qué fuente pura te lavas la cara?
Muchachita limpia, si eres una copa
llena de agua clara.

Me llama la atención estos dos versos: " muchachita limpia, quien a ti se atreva, que como tus manos huela a ropa nueva". de los que se pueden deducir, que a veces nos acercamos a las personas con las manos y el corazón sucio, embarrando lo que estaba limpio, disfrazando las verdaderas intenciones.