POESIA DE ARTE MAYOR...

POESIA DE ARTE MAYOR
***********************

Y Santa Teresa, ¡vaya…
vaya monja!

Qué doctora tan sencilla,
qué mística tan graciosa,
qué santa de ancha es Castilla,
qué Gloria tan española,
y qué española tan guapa,
tan guapa y requetehermosa,
¡lo que se dice una monja
flamencona!
Si loca de gracia estaba
ahora se volvió más loca
oyendo cómo reían
y gemían
los duendes de Andalucía
en las manos de Montoya.

Se recogió bien el hábito
de una punta a la cadera;
alzó los brazos al aire
llenándolos de canela
-dos jaulas eran sus manos
dando a los pájaros suelta-
y, a quiebros y a giros y
a todas las cosas buenas,
se echó a medir el tablao
de la fiesta.

Y, llevada de su genio,
en una de aquellas vueltas,
dio un volantazo tan grande
con su bata de estameña,
que por poquito poquito
me lo tira de cabeza
a su San Juan de la Cruz
que, lleno de misticismo
como siempre estuvo, estaba
mirándola embobaíto.

San Pedro, que siempre tiene
carita de mal humor,
desde la puerta miraba
serio a Dios, como diciendo:
¡Esto no es serio, Señor!