Noemi, un saludo.

Nada me llevaré cuando me vaya;
ni siquiera el frescor de los jardines,
aquí os dejo el dulzor de los jazmines
y el rumor de las olas en la playa.

Al tedioso cantar de la zumaya
recordaré el sonar de los violines,
ya se van de mi boca los carmines
y os miraré feliz en mi atalaya.

Mas no quiero marcharme y que mi voz
no haga mellas en vuestros sentimientos,
no haga heridas en vuestro corazón.

No me conformo con esta huida atroz,
no me conformo y no quiero lamentos;
yo pienso que me falla la razón.

Noemí

No necesariamente la persona protagonista del soneto va a morir. PRESIENTE SU MUERTE, PERO NO SU MUERTE FÍSICA, SÍ, SU MUERTE INTELECTUAL.
Decididamente, pero con muchas dudas huye al exilio.

Noemi, un saludo.
Respuestas ya existentes para el anterior mensaje:
Saludos también para ti, Ángel.
Buena semana.