PARA CIUDADANA. MI ORDENADOR (QUE ES DE MI HIJO, EL MÍO LO TENGO EN MI CASA) anda como la tartana de Silvino. Me salta las letras y tengo doble tarea: escribir y luego coregir, así y todo... se me va alguna. Luego las letras son pequeñas y a duras penas las veo (con gafas y toda la mosca). Así que aquí gano yo: mi ordsenador es peor que el suyo.