PROFESIONALES LIBERALES:
Se supone que todos estamos al servicio de todos con nuestro trabajo, con el ejercicio profesional de las actividades normal y libremente elegidas; salvo que no se haya alcanzado la “nota de corte” y nos hayamos obligado de otra cualquiera que, antes o después, terminan dándonos el “titutulillo” de marras”; aunque no tengamos “ni idea”, ni vocación, ni “na”, para ejercerla con un mínimo de decencia, de conocimiento de causa, de motivación, etc., lo que perjudica a quien tiene la desgracia de ser tratado, analizado, asesorado, diagnosticado, etc., por semejante, que haberlos “haylos”; especialmente en políticos, como nos pone de manifiesto la prensa, la rumorología, las redes sociales, que cuando obtienen una “prevenda” y, por ejemplo, les faltan algunas asignaturas para terminar, obviamente sin examinarse, se “hace lo que sea con las actas de calificaciones” y….APROBADOS
Esto es lo que sucede donde más en política.
Se supone que todos estamos al servicio de todos con nuestro trabajo, con el ejercicio profesional de las actividades normal y libremente elegidas; salvo que no se haya alcanzado la “nota de corte” y nos hayamos obligado de otra cualquiera que, antes o después, terminan dándonos el “titutulillo” de marras”; aunque no tengamos “ni idea”, ni vocación, ni “na”, para ejercerla con un mínimo de decencia, de conocimiento de causa, de motivación, etc., lo que perjudica a quien tiene la desgracia de ser tratado, analizado, asesorado, diagnosticado, etc., por semejante, que haberlos “haylos”; especialmente en políticos, como nos pone de manifiesto la prensa, la rumorología, las redes sociales, que cuando obtienen una “prevenda” y, por ejemplo, les faltan algunas asignaturas para terminar, obviamente sin examinarse, se “hace lo que sea con las actas de calificaciones” y….APROBADOS
Esto es lo que sucede donde más en política.