LAS HEREJÍAS. NESTORIO. EUTIQUES.
Era Constantinopla, además de corte del Emperador, residencia del Patriarca o jefe supremo en la Iglesia en Oriente y representante directo del Papa. Grandes genios en ciencia y santidad ocuparon el patriarcado de la Iglesia Oriental; pero otros, escogidos muchas veces a gusto y capricho del Emperador bizantino, soportaron de mala gana la autoridad suprema del Papa de Roma. Esto, la frivolidad, las disputas y querellas bizantinas, que nada respetaban fueron causa de muchas herejías y discordias religiosas, tanto que se ha llamado al imperio bizantino " cuna de todos los errores".
En el siglo V apareció la herejía de Nestorio, patriarca de Constantinopla que negaba a la Santísima Virgen el título de Madre de Dios y luego la del monje Eutiques, el cual negaba en Jesucristo la naturaleza humana. De las discordias entre los católicos bizantinos se aprovecharon los pueblos bárbaros para acosarlos con sus invasiones.
Era Constantinopla, además de corte del Emperador, residencia del Patriarca o jefe supremo en la Iglesia en Oriente y representante directo del Papa. Grandes genios en ciencia y santidad ocuparon el patriarcado de la Iglesia Oriental; pero otros, escogidos muchas veces a gusto y capricho del Emperador bizantino, soportaron de mala gana la autoridad suprema del Papa de Roma. Esto, la frivolidad, las disputas y querellas bizantinas, que nada respetaban fueron causa de muchas herejías y discordias religiosas, tanto que se ha llamado al imperio bizantino " cuna de todos los errores".
En el siglo V apareció la herejía de Nestorio, patriarca de Constantinopla que negaba a la Santísima Virgen el título de Madre de Dios y luego la del monje Eutiques, el cual negaba en Jesucristo la naturaleza humana. De las discordias entre los católicos bizantinos se aprovecharon los pueblos bárbaros para acosarlos con sus invasiones.