EDITORIAL ABC....

EDITORIAL ABC.

RTVE: degradante ofensa a las víctimas.

Inhabilitado políticamente por la Justicia, debido a su copioso pasado criminal, nada pinta Otegui en RTVE salvo para ejecutar un indecente intento de blanqueo.

ABC.

Actualizado:

27/06/2019 09:49h.

La entrevista que Televisión Española difundió ayer con Arnaldo Otegui es una vergüenza para este ente público y una ofensa a la sociedad española y a las víctimas de ETA. El devenir de la actual dirección de RTVE está marcado por un servilismo continuo a los intereses del Gobierno socialista, ahora mismo en funciones, y a la agenda política y social de la izquierda. Así, las monjas asesinadas por el Frente Popular quedan en la categoría de «desaparecidas» mientras que un terrorista reincidente merece una entrevista estelar en horario de máxima audiencia. Todo encaja en la degradación de la cadena pública, tan sensible con sus «viernes negros» frente al PP y los lacitos naranjas «contra la manipulación», y tan pastueña a la conveniencia del PSOE de tener satisfecho a Otegui y controlados los votos de EH Bildu en el Congreso.

Para frenar éticamente la presencia de este terrorista en la televisión pública no hay escrúpulos de «memoria histórica», la cual explica que el atentado de la T4 fuera un «accidente», según declaró el entonces presidente Rodríguez Zapatero, y la masacre de monjas, una desaparición. También con Otegui hay continuidad entre TVE y el tratamiento que la izquierda viene dando a los proetarras desde los tiempos de la negociación con ETA, cuando el inevitable Zapatero dijo de Otegui que había hecho «un discurso por la paz».

Ahora se trata de que aquella negociación política tenga una justificación histórica blanqueando el pasado de un terrorista multirreincidente y, de paso, premiar a Bildu en el proceso de normalización de ETA en la historia de España. La independencia profesional de un ente público no significa neutralidad ante un pasado marcado por el terror, el secuestro, la extorsión y el crimen. Cientos de personas fueron asesinadas, otras muchas secuestradas y heridas y más aún destrozadas de por vida, expulsadas del País Vasco y ahora obligadas a ver en la televisión pública a un símbolo de lo peor de ETA. Difícil que esta televisión pública pueda mostrarse más servil al que manda y sus objetivos, aunque se trate de un Gobierno en funciones.

Inhabilitado políticamente por la Justicia, debido a su copioso pasado criminal, y sin un acta de diputado o concejal que blandir como excusa, nada pinta Otegui en RTVE, salvo para ejecutar un indecente intento de blanqueo a un sujeto que, además de un espantoso pasado criminal del que nunca se ha arrepentido, sigue persiguiendo la destrucción de España. La dimisión de Rosa María Mateo es ya imprescindible. Tras aquel bochorno disparatado del debate electoral, la entrega sin matices del ente al sanchismo hace inviable la permanencia de los actuales gestores. Los españoles pueden tolerar la diaria y machacona manipulación, pero nunca esta incalificable ofensa a las víctimas.