Ángel, ¡Plas, ¡plas, ¡plas, ¡plas, ¡plas!, ¡cuanta...

Quién vende pisos del IVIMA ocupados, a fondos buitres, y quien no cumple la orden judicial... ah! Ayuso y el PP.

Y Cristóbal Colón que también fue del PP.

Ángel no estoy de acuerdo que fuera del PP si nadie aun despues de mas de500 años ha sido capaz
de saber de donde era este tal Colón se llevo a la tumba de donde era, casi todas las regiones
querian que fuera de ellas, y paises unos cuantos nadie se ha puesto de acuerdo.
Era un apatria, incluso su muerte esta llena de polimicas.
manuel

La historia de Colón podría ser un buen tema para mensajes,

Ángel te parece poco el de los poetas para embarcaros con Colón
tambien pero bueno si te apetece cuando quieras.
NOS EMBARCAMOS CON COLON QUE ERA UN GRAN MARINERO
Y CON LOS HERMANOS PINZONES QUE TAMBIEN ERAN MARINEROS..............
manuel

Lo digo por si alguien quiere iniciar el tema.

Hombre, hasta hace un rato hablábamos de viviendas...

Pues seguiremos hablando de viviendas. Me trae a la memoria que los OKUPAS en tiempos del dictador no existían. Que a nadie se le ocurriese habitar una vivienda que no fuera la suya. ¡Bueno era Franco! y en su representación estaba la policía armada o la Guardia Civil. Te arreaban cuatro castañas que ni se te volvía a ocurrir. Bien, ¿Quién cojorbas arregla lo que tenemos con los okupas? Estos políticos de bajo nivel intelectual no son capaces de arreglar este tinglado ocupacional. ¿Cómo es posible que te quiten una vivienda que es tuya... tuya... tuya... y cuando son desalojadas, prepara unos miles de euros para arreglar el piso que estos carapijos (que no tienen ni media torrija) se meten sin más y ¡Hala! Ancha es Catilla. Alegan que no tienen vivienda... ¡Joer! Por esa regla de tres yo no tengo dinero, voy al banco y me llevo lo que pille; Aquí sí, la poli como te atrape vas a la comisaría. Lo mejor sería que los vecinos y el barrio entero, les dieran unas buenas, las del copón. Socialistas, peperos y resto de partidos. ¿Qué hacéis? Nada.

Ángel, ¡Plas, ¡plas, ¡plas, ¡plas, ¡plas!, ¡cuanta razón llevas!