SERGIO Ramos, con la ventana del conductor bajada, iba firmando camisetas del Sevilla o del PSG... hasta que un hombre aparece con una camiseta del Real Madrid. Él la aparta y sigue con su rotulador firmando, pero no la del Madrid. El hombre vuelve segundos después y él vuelve a rechazar la elástica madridista. Enseguida, el madridismo más hiperventilado se ha indignado por una imagen que ha llamado mucho la atención y que muchos han visto como uno feo innecesario y miserable de alguien que vistió ... (ver texto completo)