Entre Canales y Garaño, aquí hace tres o cuatro años era una pradera llenita de setas, sobre todo champiñones y también de San Jorge e incluso lepiotas, pero lo rotaron para el ganado, acabaron con las setas y ahora sólo hay cenizos, y las vacas a dieta.
Vamos unos desgraciaos, por llamarles algo suave, como todo ¡
Vamos unos desgraciaos, por llamarles algo suave, como todo ¡