Y, un par de días más tarde, al volver el cura de nuestro cuento para reconocer las obras, "Canales-La Magdalena" Un solo pueblo

Y, un par de días más tarde, al volver el cura de nuestro cuento para reconocer las obras, encontró al artista muy alborotado porque, la noche anterior, había andado por allí el oso, que el lo había oído, clara y distintamente, gruñir y arañar, con las zarpas, la piedra de los muros y hasta lo había visto por el ventanuco de la sacristía, negro y enorme, ensimismado en su labor d zapa y enredando con un rastro que había concluido la tarde arrimado a la puerta de la ermita y, por la mañana, apareció en el suelo delante del ventanillo.