LA IMPRENTA

Vamos a indagar ahora en uno de los episodios de la historia cultural de mayor relevancia de todos los tiempos: la aparición de la imprenta.

Hay quien coloca la fecha de 1453, en que salieron impresos los primeros ejemplares de la Biblia editada por Gutenberg, como el hito que inicia la Edad Moderna. Lo cierto es que el descubrimiento de la imprenta es mucho más que el avance de una técnica humana. Cambió el mundo hasta extremos impensables.

El uso de caracteres grabados en tacos de madera que, mojados en tinta, servían para imprimir signos sobre una hoja de papel nació como obra de un grupo de monjes budistas chinos, al parecer en el año 593. La primera obra impresa, con ilustraciones, también en China, data del año 868. El logro fue importantísimo, pero no se desarrolló especialmente desde entonces. La razón es sencilla: la escritura china requiere caracteres muy complicados, y tan numerosos -son más de diez mil- que la tarea de grabarlos, ordenarlos y manejarlos resultaba extraordinariamente difícil.