Una vez descubierta, Juana es felicitada por el rey, que admira su valor y la ofrece en recompensa, "Canales-La Magdalena" Un solo pueblo

Una vez descubierta, Juana es felicitada por el rey, que admira su valor y la ofrece en recompensa ciertos privilegios para ella y los de su zona.

Toma esas concesiones
y vete para tu casa
que jamás servirá al rey
ninguno de la tu raza
poseeréis todos los montes
y no pagaréis portazgo
y allí tú disfrutarás
con títulos nobiliarios.

La Dama, después de este episodio, puso toda la ilusión en partir hacia sus tierras para hacer partícipes de la buena nueva a cuantos estaban afectados por ella.

«Anda, mi viejo caballo,
anda, mi noble alazán
ganaremos Arintero
antes de la Navidad.
No otro mejor aguinaldo
pudiéramos presentar
a los nuestros que este pliego
de exención y libertad...».