Los beneficios del pulpo en los bebés prematuros son probados. Cuentan que los pequeños creen que los tentáculos son el cordón umbilical. El hecho de aferrarse a ellos les da tranquilidad: calman al bebé, mejoran su respiración, evitan pequeños accidentes como que se arranquen los respiradores o las sondas y mejoran niveles de oxigeno en sangre.