Decíamos esta mañana que fallaron los pronósticos que decían que este año no iba a ser de mucho polen pero si hay chopos, antes o después viene. Y así lo tendremos unas semanas. Pero hoy no huele mal, pues se ve que el viento, o lo que sea no lo trae.

¡Ay! es que la naturaleza no se puede controlar y siempre hay algo que falla en los pronósticos. Cuando menos lo piensas, llueve, nieve, hace frío, hiela, hace calor... graniza. O no la conocemos o nos da sorpresas pues no es muy fiable que todo tenga que ser siempre de la misma manera. Siempre falla algo aunque todo se haya previsto. No es lógica nunca sino que actúa con unas reglas que no conocemos todavía. Tengo tanto que hacer que hoy me he quedado en blanco. Mañana, será otro día.

Me siento muy orgullosa de este rosal del que tuve un día miedo por si mis perros le socavaban las raíces. Fue por ella que me puse manos a la obra, la protegí junto a los tulipanes, y ahora me siento muy bien cuando la veo florecer, lo mismo que el día que salieron los tulipanes amarillos por entre los palés.

No sé si los perros han visto mis desvelos pero ya no entran en las zonas de las flores, y en breve habrá iris, creo que azules, ya veremos de qué color son.

Saludos cordiales