La verdad es que desde el principio parecía algo muy raro que un personaje de tal relevancia cayera tan bajo en el sentido de las graves acusaciones que se le hacían y algunos medios ya se hicieron eco de tales rarezas. Pero lo que si está claro es que el sistema judicial americano funciona a las mil maravillas. Que un fiscal que lo manda al infierno en un momento lo saque al cabo de unos días y le levante medidas cautelares, es de quitarse el sombrero. Qué distinto es el Conde Pumpido etc. etc. etc.
Saludos.
Saludos.