Ciudad mediterránea por excelencia
Barcelona tiene un estilo de vida propio que la hace única en todo el mundo. Su carácter mediterráneo invita a los visitantes a ir a los barrios y conocer a su gente, visitar las playas y los espacios naturales y disfrutar del ocio con una gran oferta cultural, gastronómica y comercial.
La ciudad tiene numerosas zonas verdes, parques y jardines repartidos por todo el territorio, y más de 300.000 árboles en las calles y en las avenidas. Muy cerca están las 8.000 hectáreas del parque de Collserola, uno de los espacios naturales más importantes del mundo al lado de una ciudad.
Con más de 4 kilómetros, las playas de Barcelona son el espacio de ocio más utilizado en el área metropolitana, con cerca de nueve millones de usuarios anuales, gracias al gran nivel de seguridad y de higiene y a sus equipamientos.
Ciudad de servicios
La ciudad dispone de buenos servicios médicos y sanitarios, tanto públicos como privados, y de una red educativa de calidad, desde las escoles bressol hasta las universidades y los estudios superiores.
La capital catalana, además, es la única gran ciudad europea con playas dentro del núcleo urbano, y sus parques y montañas la convierten en un sitio ideal para disfrutar al aire libre, recorriéndola a pie o con bicicleta.
Las playas de Barcelona son muy seguras, de aguas habitualmente tranquilas y con una temperatura del mar que permite bañarse desde la primavera hasta el otoño. Se extienden desde el barrio marinero de la Barceloneta, al lado del Port Vell, y dibujan todo el frente marítimo hasta la zona del Fòrum, en el extremo norte de la costa barcelonesa.
Además de las playas, Barcelona dispone de grandes espacios verdes, como parques urbanos y de montaña, jardines botánicos, laberintos y espacios mágicos como el Park Güell. La ciudad disfruta de una ubicación ideal entre el mar y la montaña, y a la oferta de Barcelona se añade la de la Costa Brava, Figueres y Dalí, los Pirineos y PortAventura, entre otras.
Barcelona tiene un estilo de vida propio que la hace única en todo el mundo. Su carácter mediterráneo invita a los visitantes a ir a los barrios y conocer a su gente, visitar las playas y los espacios naturales y disfrutar del ocio con una gran oferta cultural, gastronómica y comercial.
La ciudad tiene numerosas zonas verdes, parques y jardines repartidos por todo el territorio, y más de 300.000 árboles en las calles y en las avenidas. Muy cerca están las 8.000 hectáreas del parque de Collserola, uno de los espacios naturales más importantes del mundo al lado de una ciudad.
Con más de 4 kilómetros, las playas de Barcelona son el espacio de ocio más utilizado en el área metropolitana, con cerca de nueve millones de usuarios anuales, gracias al gran nivel de seguridad y de higiene y a sus equipamientos.
Ciudad de servicios
La ciudad dispone de buenos servicios médicos y sanitarios, tanto públicos como privados, y de una red educativa de calidad, desde las escoles bressol hasta las universidades y los estudios superiores.
La capital catalana, además, es la única gran ciudad europea con playas dentro del núcleo urbano, y sus parques y montañas la convierten en un sitio ideal para disfrutar al aire libre, recorriéndola a pie o con bicicleta.
Las playas de Barcelona son muy seguras, de aguas habitualmente tranquilas y con una temperatura del mar que permite bañarse desde la primavera hasta el otoño. Se extienden desde el barrio marinero de la Barceloneta, al lado del Port Vell, y dibujan todo el frente marítimo hasta la zona del Fòrum, en el extremo norte de la costa barcelonesa.
Además de las playas, Barcelona dispone de grandes espacios verdes, como parques urbanos y de montaña, jardines botánicos, laberintos y espacios mágicos como el Park Güell. La ciudad disfruta de una ubicación ideal entre el mar y la montaña, y a la oferta de Barcelona se añade la de la Costa Brava, Figueres y Dalí, los Pirineos y PortAventura, entre otras.