No pierdas el tiempo, amigo C. Javier. No sirve de...

No pierdas el tiempo, amigo C. Javier. No sirve de nada echarle perlas a los cerdos, ni flores a los perros. Como sabes, fue dicho y escrito por el que era sabio y gran conocedor de la perversidad y soberbia humanas.

La maldad se ha apoderado de los hombres de este mundo, pero no se ve a simple vista, pues anda oculta en el fondo de sus corazones. Hay sujetos que la ponen a flote, cuando cometen, aprueban y apoyan los más horrendos crímenes, entre los que sobresale el aborto.

Piensan que defienden grandes cosas, permitiendo matar a seres inocentes. Su estado es de completa ceguera, pues su orgullo les impide ver y escuchar los débiles y apagados gritos de su corazón y conciencia. Ya nada les detiene y caerán aplastados por la maldad que ellos mismos han ido alimentando en su osadía y temeridad, al querer conseguir con asesinato algo que sólo con amor y humildad se debe lograr. Los buenos se purificarán y los malos se perderán. Se debe tomar nota de esta advertencia.