Dicen que todos llegamos a este mundo con algunos talentos, seamos generosos en multiplicarlos para donarlos a otros, también se afirma que las preguntas sin sentido acarrean respuestas incoherentes, y en esta línea se alude a que uno aprende más de las buenas preguntas que de las respuestas elocuentes, y de las exposiciones sencillas y claras, que de las argumentos extensos donde afloran alguna que otra vanidad.
Partiendo de estas premisas cuando mis impulsivas actitudes me lo permiten, leo, leo y releo tanto como puedo en este estupendo foro, y luego me meto en el agua calentita, con sal perfumada de coherencia, con frases y argumentos de unos y otros, con lecciones de cordura que me ruborizan por mi deficiencia, con pensamientos e ideas que nunca habría imaginado por mi mismo, y no tengo por menos que dar “GRACIAS”, a todos los que escriben, porque aún sin estar de acuerdo con todos, todos aportan el condimento que necesito para terminar mi ensalada.
No debo dejar de sincerarme y deciros que no todo es de color de rosas, porque siento en lo más profundo de mi, que lo que hoy me parece tan lúcido, mañana se me antoja algo tenue, y quizás sea esta inseguridad mía, ésta fatal o no, de la creencia de que nunca debo estar en posesión de toda la verdad, la que me hace sentirme con menos estrés, aludiendo a las experiencias la duda me acompaña frecuentemente, porque acostumbro a barrer algún que otro rincón y no quedarme en las primeras pajas.
Partiendo de estas premisas cuando mis impulsivas actitudes me lo permiten, leo, leo y releo tanto como puedo en este estupendo foro, y luego me meto en el agua calentita, con sal perfumada de coherencia, con frases y argumentos de unos y otros, con lecciones de cordura que me ruborizan por mi deficiencia, con pensamientos e ideas que nunca habría imaginado por mi mismo, y no tengo por menos que dar “GRACIAS”, a todos los que escriben, porque aún sin estar de acuerdo con todos, todos aportan el condimento que necesito para terminar mi ensalada.
No debo dejar de sincerarme y deciros que no todo es de color de rosas, porque siento en lo más profundo de mi, que lo que hoy me parece tan lúcido, mañana se me antoja algo tenue, y quizás sea esta inseguridad mía, ésta fatal o no, de la creencia de que nunca debo estar en posesión de toda la verdad, la que me hace sentirme con menos estrés, aludiendo a las experiencias la duda me acompaña frecuentemente, porque acostumbro a barrer algún que otro rincón y no quedarme en las primeras pajas.