¡QUÉ FUE DE NOSOTROS!, España

¡QUÉ FUE DE NOSOTROS!

¡Qué difícil y oscura solución nos aguarda Valmadros! Cómo volver atrás los pasos cuando se han hecho con la cadena del collar otros amos. Ya los perros hablan alemán y han olvidado el castellano. Las huertas producen ladrillo indigesto que no necesita de ser regado. La materia prima de nuestra tierra son ahora los impuestos, la depresión y el paro; el desencanto y la impotencia ante las circunstancias irreversibles que esta aventura Europea nos ha dejado, se enmaraña con el descontento de las regiones hermanas que, según abominan ellos, no son de nuestra sangre y se hacen sentir bastardos ¡Qué pena más profunda para España! cuando la familia se niega al afecto que les une.

Yo no tengo tus años. Soy más joven. Nací en 1960 y comprendo, comprendo tanto y peno de no hallar aquel antiguo vecindario: casas de puertas abiertas en las noches, de seguridad y respeto vecinal; de gentes con muchos valores humanos y pocas “perras” pero tan atentos a servir y compartir lo poco que se tenía, que no era mucho como digo; y a pesar de ello… no se echaba de menos ni el pan.

Con mis saludos Valmadros.