Me he criado en un pueblo y hubo un tiempo que nunca se cerraban las puertas y si se hacía se dejaban las llaves detrás de la persiana, no existía el miedo a que te robaran ni mucho menos a que te la okuparan. ¿En qué nos estamos convirtiendo?
TRIANA. Libertad total en las casa de los pueblos. Las puertas estaban abiertas, había confianza entre los vecinos. Todo el día abiertas, excepto por la noche al ir a dolrmir.
Ángel, efectivamente así era, no había que preocuparse de que nadie entrara en tu vivienda, tranquilidad total, lo mismo que cuando ibas por la calle a cualquier hora del día, ahora es imposible.
TRIANA. Es cierto lo que comentas. En aquellos tiempos los bares cerraban a las dos de la madrugada. Una vez que cerraban, todos a sus casas, aunque podías estar toda la noche hablando con los amigos y echando unos pitillos. Nadie se metía contigo. Cuando me despedía de mis amigos, iba solo por la calle... SOLO... sin miedo. Tan solo veía a la pareja de la polícia que amablemente nos dábamos las buenas noches.