¡Claro qué me acuerdo del bar Miserias! Daba para dos...

Y yo también, en la maternidad.

Te acuerdas del bar Miserias?

¡Claro qué me acuerdo del bar Miserias! Daba para dos calles. Hacía esquina. Conocía al Sr. Miserias y a uno de sus hijos que puso el bar más abajo, donde la panadería Rabadán.