Las maquinas, siendo por sí incapaces de lucha, han...

Las maquinas, siendo por sí incapaces de lucha, han logrado que el hombre luche por ellas.

la paciencia debe ser una de las primeras virtudes de los jueces.

Nada es perfecto en el mundo, la flaqueza y el error son propiedades inseparables del ser humano.

No son los perfectos, sino los imperfectos, quienes están necesitados de amor.

El matrimonio debe combatir sin tregua un monstruo que lo devora todo, la costumbre.

Las tristezas no se hicieron para las bestias, si no para los hombres; pero si los hombres las sienten mucho, se vuelven bestias.

El que no tiene carácter no es un hombre, es una cosa.

Un buen jefe es el que sabe extraer de los demás mejor partido del que ellos mismos sacarían.

Un eco es muchas veces más bello que la voz que repite.