Pasó el tiempo, y la niña de trenzas rubía se convirtió en una bella joven, el hechizo seguia su rumbo, y el brujo estaba encantado, con su juguete.
La joven Majestuosa, solo queria, que llegara la noche, para seguir soñando, pués en sus sueños, veía a un joven que le decía,! vive, para seguir viviendo!. Estas palabras la hizo recapacitar y disfrutar de lo qué disponía.
En el pueblo, de donde era la joven, solo había pena y dolor, y el recuerdo de la bella joven, siempre estaba presente.
La hermana desconsolada pensaba, que había sido por su culpa, Ya que si no hubieran ido por aquel atajo, que ella propuso a su hermana, para llevarle la comida a su padre, nada de lo que ocurrió hubiera pasado.
Un día un joven, que paseaba por allí, la sintió llorar, y le preguntó ¿Porqué una linda joven como tú esta llorando?. Y la joven se enjugó las lagrimas, y le contó la historia de su hermana, y el hechicero.
Entonces, el Joven, decidió...