¿Por qué tienes tanto miedo de mí, Ferisa? El miedo...

¿Por qué tienes tanto miedo de mí, Ferisa? El miedo es ignorancia. Conoces mi conducta y también mis principios morales y espirituales. Entonces ¿por qué ese miedo? No tengas temor de mí, sino de tí mismo, porque no conoces la verdad y no eres libre, al ser esclavo de tu pensamiento cínico y engreído.

Te exhorto a creer en los valores universales que viven en nosotros, los que amamos a Dios, y que queremos injertar en el árbol de vuestras existencias ateas, para que podáis pasar de larvas a crisálidas.

Recuerda: "LO QUE SEMBRÉIS, RECOGERÉIS". Las semillas que has hecho germinar y crecer, te darán frutos amargos. Os he dicho, de todas las formas, lo que gravita sobre el destino de esta Generación, y con pena veo vuestra apatía y vuestra cínica indiferencia.

Ni siquiera los signos premonitorios cargados de pesados sufrimientos, sacuden tu Alma adormecida en la niebla de tus desenfrenados pensamientos egoístas y delictivos. Tu obstinada repulsa hacia Dios y lo sagrado atrae, cada vez más, hacia tí efectos negativos capaces de aumentar, desdichadamente, el gran trastorno de tu mente y tu corazón.

Ha sido dicho: "LOS VIVOS ENVIDIARÁN A LOS MUERTOS POR LO QUE SUS OJOS ESTARÁN OBLIGADOS A VER". Piensa sobre estas palabras y si no quieres hacer otra cosa, ruega, ruega, porque es verdad que el brazo potente de Dios caerá sobre tí y grande será el castigo.

Los signos ya son patentes. Dichosos los que se hayan arrepentido.