Los no creyentes y creyentes no partidarios de procesiones...

Los no creyentes y creyentes no partidarios de procesiones tienen que sufrir las consecuencias de los desfiles callejeros que organizan unos señores en un espacio público que no está diseñado para tales ritos. No cabe ponerse a la defensiva de la religión, la tradición el respeto a la creencia, la tolerancia etc. etc.; lo que se combate es que tales manifestaciones callejeras (que carecen de regulación legal) que son capricho de hermandades y cofradías no se celebren en los lugares donde limitan los derechos de otros ciudadanos que a más inri se les tilda de intolerantes. Que duda cabe que son ellos los intolerantes por no tener en cuenta las quejas de cientos de ciudadanos molestos por unas u otras causas.

La candidata a alcaldesa de Sevilla por el partido de Podemos opina que la semana santa sevillana debe celebrarse si así opina el pueblo.

saludos