DIJOME MI HERMANO, La Poesía

DIJOME MI HERMANO.

Por entre los chopos, la luna salía,
Va muy poco a poco, jugando escondida,
Yo estaba en el rio, sentada en la orilla,
Tirando unas piedras que al agua caían,
Vi pasar un mozo, que a caballo iba,
Dijome requiebros, que yo no entendía,
Paró su caballo, junto a la vera mía,
Se acercó a besarme, y yo no quería,
Llegara mi hermano, del molino venía,
Con la horca al hombro, como él solía,
Al ver ese cuadro, que ante sí tenía,
Se encendió su sangre, por la honra mía,
Matáralo al punto, y a mí me decía,
Márchate de prisa, corre, hermana mía,
No digas a madre, ella me maldeciría,
Dice que la muerte, solo Dios la envía,
Lo que aquí ha pasado, no lo entendería,
Tú, no digas nada, calla hermana mía,
Di que te caíste, la verdad no digas,
Que Dios te perdona esa mentirijilla,
Que a mí me perdone, “me cegó la ira”,
Porque un sinvergüenza ultrajo a una chiquilla.
Pa. Sa. Ma.