ERRANTE VA POR LA VIDA, La Poesía

ERRANTE VA POR LA VIDA

Ese pobre caminante,
que va solo por la vida,
sin perro que lo acompañe,
Y sin amor de familia.
Porque cogió un mal camino,
Principio de perdición,
El caprichoso destino,
por su falta se vengó.
Marcha por la vida errante
sin saber donde parar,
como hoja que del árbol,
se la lleva el vendaval.
Donde el curioso destino
a él, lo quiera llevar,
a ver si encuentra un cobijo,
donde se pueda parar.
¡Ya sea, debajo de un puente,
o en un vacío portal,!
¡A la orilla de una fuente!,
¡debajo de un robledal!,
Donde su cuerpo inerte,
al fin pueda descansar.

Cuando suene la campana,
y esté tocando a oración
acuérdense de esa alma,
que la vida maltrató.
Pa. Sa. Ma.