CAMPOS DEL OLVIDO, La Poesía

CAMPOS DEL OLVIDO.

Hoy le pregunté a un jilguero
que en la rama descansaba,
si la palabra ¡Te quiero!
de algo a él le sonaba.

Yo tengo un vago recuerdo
de que alguien me la repetía,
pero ya olvide su voz,
y también su fisonomía.

El jilguero contestó
que eso si lo recordaba,
lo repetía un caballero
que a mi lado siempre estaba.

Con su voz y su silbido
a todos nos contagiaba,
se escuchaba en los caminos
donde siempre paseaba.

Pero hacía mucho tiempo
que no lo había vuelto a ver,
se marchó una noche fría
y ya no pudo volver.

Aquí lo echamos de menos
nos alegraba su silbido,
lástima que se marchara
a los campos del olvido.
Pa. Sa. Ma.