SE DEJAN ACARICIAR, La Poesía

SE DEJAN ACARICIAR

Quisiera ser jardinero
para tener en mis manos,
las preciosas mariposas
¡aunque antes fueran gusanos!

Eso la rosa lo nota
y no quiere que se aleje,
ese ser tan delicado,
que hasta la seda protege.

La bella rosa permite
que con mimo la acaricien,
Y hasta se pone más roja
al escuchar lo que dicen.

¡Rosita, la más hermosa
olorosa y delicada!
déjame oler tú perfume
hasta quedar impregnada.

La rosa que es delicada
al notar su suavidad,
desprende mayor aroma
dejándose acariciar.

Hasta sus pétalos riza
cuando nota las cosquillas,
y a la bella mariposa
le da un beso en la mejilla.
Pa. Sa. Ma.