DICEN QUE SOY SOÑADORA
Dicen que soy soñadora
pero a mí me gusta serlo,
y hasta mezclar muchas veces
lo que es real con los sueños.
Porque en esta vida ingrata
hace a veces tanto daño;
sin sueños no aguantaría
Las penas y desengaños.
Ya no soy aquella niña
que corría por los prados
con sueños y fantasías,
pues la vida me ha cambiado.
Pero en algún rinconcito,
de aquella niña, quedó algo,
algún sueño inalcanzable
y está esperando lograrlo.
Que nadie robe mis sueños
nadie se atreva a borrarlos,
que quiero seguir con ellos
y con lo real mezclarlos.
Como aquella gran señora
Doña Rosalía de Castro,
quisiera soñar como ella
con
primaveras y campos.
Con aquellas almas puras
y la blancura de nardos,
las eternas primaveras
y aquel verdor de los prados.
Pa. Sa. Ma.