COMO UNA PESADILLA, La Poesía

COMO UNA PESADILLA

Borrándolo de tú mente
creíste estar más dichosa,
pero la dicha no existe
en noches tan tenebrosas.

Si en la mente lo has borrado,
en la memoria está impreso,
y en noches sin luz de luna
alumbra tus pensamientos.

Turbada por su presencia
aunque sea en la memoria,
vuelves a sufrir vivencias
de aquellas viejas historias.

Recuerdas cuando en tú pecho
brotaba un volcán ardiente,
de amores y fantasías
viendo al príncipe valiente.

Pero una noche de luna
el príncipe de tus sueños,
se mostró cual Lucifer
salido de los infiernos.

Al quitarse la careta
pudiste verle su rostro,
sus ojos eran volcanes
siniestros y misteriosos.

Ese semblante tan duro
que a tus ojos se mostraba,
era de un ser despiadado
que su maldad ocultaba.

Se te cayó aquella venda
sufriendo tal desengaño,
que aquellos hermosos sueños
de golpe se derrumbaron.

Hoy lo viste por la calle
a la luz de aquel farol,
y con temor en tú rostro
aun preguntas con dolor,

¿Cómo pude estar tan ciega,
y no ver su condición?
¿Cómo pudiste cegarme
de esa manera Señor?
Pa. Sa. Ma.