Buenos días Estrella: ...

LA MIRADA PIXELADA

Cuando el amanecer se dibuja, allá por el horizonte, bosteza la claridad desparramando su nombre.

¡Qué sensación de flaqueza, para el ciego que la nombre!, que el mirar, no es ver aquello, que en la ceguera se esconde, pixelada por la bruma de pensamientos sin nombre.

¡Mirar! ¿Qué es mirar? Es acaso pixelar, es derramar los colores por estrechos callejones, conduciendo a la caída de regueras tan cautivas, que sin poder remediarlo el fango les da acogida.

¡Qué decir de la mirada!, reducida y ondulada va fabricando erosiones, por aristas de ilusiones, y reflejos de añoranzas.

¡Qué decir de los que miran!, si la vista está perdida.

Sólo les queda visión para mirar al montón de paja descolorida.

Cuando mirar, es mirar, con el alma en carne viva. Con los lentes que alargaron y ensancharon los sentidos de la vida. Son abrazos incesantes a divergentes caricias, a esperanzas e ilusiones que quisimos al sentirlas.

Mirar es querer ver. Sólo eso, querer ver.

Cuando la niebla oculta la profundidad de un valle y no deja ver la inmensidad de lo grande.

Y soplando el viento inquieto, se despejan esas brumas, que enmohecen, hasta el aliento.

Un saludo

Estrella

Buenos días Estrella:
Tu poema me ha parecido precioso. Lo rimas de forma irregular pero con acierto y tiene mucha profundidad en ese mirar tuyo, que intuyo, a fuerza de mirar, haces que la bruma desaparezca.
Muy bonito, de verdad Estrella
Besos