Ahora estamos viejos
y tarareamos solo cosas inimaginables
la muy vieja rima del viejo marinero
pues cuando la cantaste
viejo Coleridge
nos la cantaste a nosotros
la cantaste para nosotros
bien lo sabías
claro
somos el albatros que tu viejo grumete abatió con arco y flecha
tal vez ese pájaro descuidado de Baudelaire en la cubierta
tal vez ese cormorán perdido
que venía del norte entre lluvias y acantilados
y moría en cada litoral
tal vez Negro Viejo de umbanda
viejos descalzos a la orilla del camino
cada uno con su rastrillo,
cada uno murmurando,
en las playas, entre
la gente y lo que no se veía
meneando tres veces la cabeza, descontentos,
susurrando
¡oh gloria de mandar! Oh vana codicia
y por aquí andamos ardiendo en la hoguera
sucumbiendo días tras día
fracasados de todas las cosas
de
todas
las
y tarareamos solo cosas inimaginables
la muy vieja rima del viejo marinero
pues cuando la cantaste
viejo Coleridge
nos la cantaste a nosotros
la cantaste para nosotros
bien lo sabías
claro
somos el albatros que tu viejo grumete abatió con arco y flecha
tal vez ese pájaro descuidado de Baudelaire en la cubierta
tal vez ese cormorán perdido
que venía del norte entre lluvias y acantilados
y moría en cada litoral
tal vez Negro Viejo de umbanda
viejos descalzos a la orilla del camino
cada uno con su rastrillo,
cada uno murmurando,
en las playas, entre
la gente y lo que no se veía
meneando tres veces la cabeza, descontentos,
susurrando
¡oh gloria de mandar! Oh vana codicia
y por aquí andamos ardiendo en la hoguera
sucumbiendo días tras día
fracasados de todas las cosas
de
todas
las