Regreso a la tierra

Mirada perdida en un recuerdo
cuyas canas le peina Manuela;
por el rostro de tristes arrugas
ruedan penas que él mismo se seca

Pero aquel Sin Pecado divino,
recordando la fuente de vida
fue la oferta que el viejo esperaba
por quedarle un billete de ïda.

Con las alas que da la esperanza
la emoción renovaba su cuerpo
y, por pura suerte, entusiasmado,
comprobó que volvía a su pueblo.

Inés..