Lo que he relatado es cierto. No obstante comparándolo con lo que me sucedió una vez para darme de baja de una compañía operadora telefónica es como comparar la noche con el día. No querían darme de baja, estuve más de 3/4 de hora esperando con el teléfono en mano. Claro que les puse tibios. Me acordé de toda la familia de los dirigentes principales. Al final me dieron una clave para poder darme de baja, así y todo tuve que cumplir el resto del contrato.