LOS LAMENTOS EN EL AIRE
Cuando se pasan los días
entre visiones sesgadas,
nunca fluyen alegrías
ni emociones caducadas.
Los lamentos se marchitan
entre vidas recordadas,
los pensamientos se agitan
en las más duras andadas.
Vives buscando caminos
entre sendas olvidadas,
quizá sueñas adivinos
de muchas tristes jornadas.
Lamentos que lleva el aire
en las frías madrugadas,
algunos lanzan desaire
con luces de la alborada.
No existen nuevos caminos,
ya no quedan más jornadas,
son tantos los desatinos
que el aire teme espantadas.
Los lamentos de la noche
son cruces de madrugada,
nadie debe hacer reproche
a ninguna encrucijada.
Deja que grite la noche
entre brisas dislocadas,
nadie debe poner broche
a las sendas marginadas.
El alcohol deja su brisa,
sobre vidas condenadas,
aunque nunca tiene prisa
en maltratar las gozadas.
La noche se viene encima
y es larga la madrugada,
algún lamento se arrima
viendo dura la jornada.
G X Cantalapiedra.
Cuando se pasan los días
entre visiones sesgadas,
nunca fluyen alegrías
ni emociones caducadas.
Los lamentos se marchitan
entre vidas recordadas,
los pensamientos se agitan
en las más duras andadas.
Vives buscando caminos
entre sendas olvidadas,
quizá sueñas adivinos
de muchas tristes jornadas.
Lamentos que lleva el aire
en las frías madrugadas,
algunos lanzan desaire
con luces de la alborada.
No existen nuevos caminos,
ya no quedan más jornadas,
son tantos los desatinos
que el aire teme espantadas.
Los lamentos de la noche
son cruces de madrugada,
nadie debe hacer reproche
a ninguna encrucijada.
Deja que grite la noche
entre brisas dislocadas,
nadie debe poner broche
a las sendas marginadas.
El alcohol deja su brisa,
sobre vidas condenadas,
aunque nunca tiene prisa
en maltratar las gozadas.
La noche se viene encima
y es larga la madrugada,
algún lamento se arrima
viendo dura la jornada.
G X Cantalapiedra.