CADA VEZ MENOS PASTORES
Por los Campos de Castilla
cada vez menos pastores,
que fueron la maravilla
sin dejar de ser señores.
No quedan grandes rebaños
ni en rastrojos ni pinares,
se van notando los años
en los preciosos lugares.
Ovejas que iban limpiando
esos pinares con hierbas,
que siempre van encontrando
en los montes sus miserias.
Pastores que van marcando
sus soledades inmensas,
vienen la tarde alegrando
sin ver sus horas muy tensas.
Viendo pastar las ovejas
el campo se ve creciendo,
hablan de cosas complejas
y no lo van entendiendo.
Rebaños marcando rumbo
por cañadas y veredas,
nunca vi su mundo absurdo
aunque las noches enredan.
Pastores con sus ovejas
por las tierras castellanas,
hoy viven horas complejas
en las más frías mañanas.
Los rastrojos sin ovejas
pueden ser tiempos amargos,
habrá quien suelte sus quejas
haciendo caminos largos.
Las merinas de Castilla
con sus tiempos recordados,
fueron la gente sencilla
de otros tiempos hoy soñados.
G X Cantalapiedra.
Por los Campos de Castilla
cada vez menos pastores,
que fueron la maravilla
sin dejar de ser señores.
No quedan grandes rebaños
ni en rastrojos ni pinares,
se van notando los años
en los preciosos lugares.
Ovejas que iban limpiando
esos pinares con hierbas,
que siempre van encontrando
en los montes sus miserias.
Pastores que van marcando
sus soledades inmensas,
vienen la tarde alegrando
sin ver sus horas muy tensas.
Viendo pastar las ovejas
el campo se ve creciendo,
hablan de cosas complejas
y no lo van entendiendo.
Rebaños marcando rumbo
por cañadas y veredas,
nunca vi su mundo absurdo
aunque las noches enredan.
Pastores con sus ovejas
por las tierras castellanas,
hoy viven horas complejas
en las más frías mañanas.
Los rastrojos sin ovejas
pueden ser tiempos amargos,
habrá quien suelte sus quejas
haciendo caminos largos.
Las merinas de Castilla
con sus tiempos recordados,
fueron la gente sencilla
de otros tiempos hoy soñados.
G X Cantalapiedra.