Respuesta intrascendente, ya que se llegó al principio...

Respuesta intrascendente, ya que se llegó al principio de todo. Y cuando no se es capaz de ofrecer una alternativa en el diálogo, sólo queda el recurso de la estúpida risa. Muy propio de los necios ignorantes que sólo hacen el payaso.
¡Qué le vamos a hacer, no se le pueden pedir peras al olmo!