CUANDO EL VIRUS CORONA NO DESCANSA...

CUANDO EL VIRUS CORONA NO DESCANSA
Con sus garras y negros pensamientos, caminando de gris por las colinas, nos parece que el virus va volando mientras quiere borrar cosas divinas. Entre brisas que vuelan por el aire, con sus horas de penas siempre encima, no le importa marcarse su desaire comentando que nunca tuvo cima. Este virus que no se ve vencido, en el tiempo que corre va dañando a la ciencia más perfecta y entendida. Es la peste que tiene nuestro siglo, que recorre el planeta todo entero, lleva prisa y guarda su sigilo, siendo un duro y cruel aventurero. Sin descanso recorre los caminos, por La Mancha se vuelve pendenciero, hace negro los tristes desatinos y le temen por todo el mundo entero. En los grandes hospitales se confunde entre brisas de gripes y lamentos, hoy las mentes más limpias ven y eclipsan el momento que viene a por sus muertos. Esperando que lleguen los remedios, entre sueños y dolores escondidos, hoy se lleva a gentes que sin medios, con el virus se sienten más perdidos. Mascarillas de freno y salvavidas, en las calles que son tan visitadas, no queremos que ganen sus partidas, entre gestos horribles de emboscadas. En la noche se siente peligroso esperando la luz de la alborada, hoy su gesto se ven tan horroroso, entendiendo que no tiene morada. Sus garras que parecen invisibles, van dejando las vidas machacadas, nunca hablaron de cosas imposibles y hoy hay gentes que mueren destrozadas. Nadie encuentra remedio a tantas dudas, cuando el virus apenas ni descansa, nos hablaron de cosas tan absurdas que en la vida hoy todo es la distancia. Seguiremos poniendo mascarillas, entendiendo que el virus va sin calma, nadie piensa que son la maravillas que pudiera tener guardado el alma. Sin contar todos muertos que se lleva, estos virus malvados sin templanza, los curados también tienen su quiebra y seguro que aumentan su balanza. El final nos parece muy lejano, entendiendo que existe la esperanza, hoy sabemos que sufre el ser humano al pensar como sube cada día la balanza. Nadie piense que puede estar salvado, ni repita las buenas intenciones, ni recalque que no vive angustiado, entre el virus y sus malas soluciones. Las garras del virus han logrado el dejarnos a veces sin defensas, mucha gente quisiera ya olvidarlo y sentir que las mentes no están tensas. G X Cantalapiedra. 14 - 5 – 2020.