Perfectamente, Noemi. Primero porque son pocas, segundo...

Perfectamente, Noemi. Primero porque son pocas, segundo porque el soneto está equilibrado y tercero porque imita a Federico
García Lorca.

No te mando un helado porque lo necesito aquí, con 40º, humedad, terral y nada de viento. Ventanas y puertas cerradas, aire acondicionado
y las chicharras enfurecidas mantienen un concierto a toda pastilla en las ramas de mi higuera, como si esto fuera el una viña sin amo...
Un abrazo