Dices que me quieres mucho...

Dices que me quieres mucho
pero no vives conmigo
a salvo siempre en tu casa
con tu esposa, buen "amigo"

Yo siempre fui un pasatiempo
para complacer tu "hombría"
ni siquiera respetaste
los hijos que yo quería.

Uno a uno eliminado
ahi, dentro de mi vientre,
dices que me quieres mucho...
¡cuanto mas hablas mas mientes!

El amor no necesita
de públicas demostraciones
para que los demás vean
que me muestras atenciones.

Yo lo que hubiese querido
es un libro de familia
y ese título de esposa
que siempre te requería.

Todo lo demás, "mi dueño"
es una moneda falsa
que a ti te sirve de mucho
porque esa es tu "salsa"

Ahora que ya somos viejos
no vale mirar atrás
y aunque nos sigamos viendo
rastrero fuiste, eres y serás.