Que duda cabe que el tiempo tiene una importancia vital en nuestro caminar por la vida, lo que dista entre la fruta verde de la podrida es básicamente el tiempo.

Frente a la impulsiva actitud de vencer, se opone la actitud relajante de estar en paz con lo que pensamos, y frente a la fuerza de la juventud se opone el desencanto de que no todo se consigue ni con la fuerza ni con la verdad.

Pues cuanto lamento por aquellos que después de haber tenido opinión, después de creer en ideas, en nuestros poderes públicos, en definitiva en la gente, hoy están gravemente enfermos porque les sangran los oídos y los ojos al comprobar que aún hay quien defiende de una u otra parte lo que defensa alguna tiene, no seamos tan insensatos de posicionarnos en un platillo o en otro de la balanza, porque un dia pensamos que estaba más cerca de nuestras ideas, seamos justos al posicionarnos en el equilibrio que está más cerca de la verdad y aportaremos más a nuestra sociedad que sangra por lo que oye y por lo que ve.

Quizas el ser falaz en las defensas hace que se decremente la credibilidad de nuestros argumentos, digamos si cuando alguien tiene razón en una u otra dirección y cuando el tema se zanje, expongamos otro para esperar que nos digan si sobre este argumento.

Saludos ... (ver texto completo)