-Nadie sabe donde empezó mi abuelo y donde termino yo. En esta casa nació mi abuelo, y mi padre y yo. Esos chopos los planté yo. Mira como está todo de palomas. Aquí vienen porque hay paz y tranquilidad. Yo no traje ninguna; no las como, no las quito las crías.... Aquellos chopos, esos siete son de León y me los regaló el obispo Almarcha. Mira qué miliario romano. Aquí hubo granjas romanas porque este pueblo se halla en el costillar que va a Segovia, Sepúlveda, Ayllón, Aranda de Duero. Clunia fue ... (ver texto completo)
EL PINTOR
Vamos subiendo al estudio por un laberinto de escaleras, bellísimas puertas de cuarterones y Vela nos enseña la habitación de su madre
-La tengo conmigo. Vino a Méjico y a Italia y a donde yo estuve, y ahora descabsa tranquilamente en su habitación, en la misma donde a mí me dió a luz.
Hay un orgullo trémulo y emocionado en la voz del pintor.
-Tiene ochenta y nueve años.
Vamos subiendo al estudio por un laberinto de escaleras, bellísimas puertas de cuarterones y Vela nos enseña la habitación de su madre
-La tengo conmigo. Vino a Méjico y a Italia y a donde yo estuve, y ahora descabsa tranquilamente en su habitación, en la misma donde a mí me dió a luz.
Hay un orgullo trémulo y emocionado en la voz del pintor.
-Tiene ochenta y nueve años.