Ángel?, te leo que no te veo un poco receptivo con...

Pues venga, por hoy nada más
Besos y hasta mañana

Ta mañana, qué tarde... Yoli no aupas a tu equipo?
Así no gana eh ¡
Felices sueños.

Ana María. Te contesto: Estamos a un partido ganado para jugar la Copa del Rey de la próxima temporada. Naturalmente, hablo de LA CULTURAL.

Un saludo.

Hola Ángel, a ver, a ver si pasa.
Hace unos años estuve viendo un partido en vivo y en directo-antes Antonio Amilibia-, ahora Reino de León- Cultural/Atlético de Madrid, Copa del Rey, ganaron los atléticos, muy interesante el partido y gran afición por parte de ambos.
Recuerdo que tenía un catarro malo, malo, íbamos un grupo importante y aunque no estaba para grandes eventos al final fui.
A base de aspirinas para bajar la fiebre-noche muy fría típica de nuestra zona-, y paladas de jarabe, hice acto de presencia.
A la entrada nos registraron, había un frente un poco sospechoso, y cual fue mi sorpresa... Me requisaron el jarabe que debía tomarlo en un cuarto de hora para las molestias.
Hubo algo de jaleo en el partido, encendieron bengalas por una parte del estadio y al final los echaron.
Me llamó la atención el que se quedaran con el jarabe-envase de plástico y tapón lo mismo, cuando nos fijamos en los asientos delanteros y llevaban los aficionados porrones, empanadas, wiski, y hasta jamones enteros... Pues fíjate si tiran un jamón al campo y le dan con la pezuña en el ojo o en los dientes a un jugador, pa haberlos matao.
Y a mí me requisan un frasquito de jarabe y de plástico blando.
Menudo control,
-Recuerdas Ángel cuando en un partido, se que jugaba el Barcelona, contra no sé quién ¡le tiraron una cabeza DE COCHINILLO a tampoco me acuerdo de quién?
Y a mí me birlan el jarabe..
Un saludo.

Ana María. De todo un poco. Vamos a ver si metemos aquí a uno de los escritores leoneses: ENRIQUE GIL Y CARRASCO. Con su novela histórica y una serie de poemas.

Un saludo para ti y para Yoli. Para ninguna más.

Ángel?, te leo que no te veo un poco receptivo con alguna dama en cuestión.
Andáaa, pelillos a la mar que son dos días.
Un abrazo.