Si te estás refiriendo a mí con esa noticia, te diré que estás faltando a la verdad. Jamás haría yo una cosa semejante. Por otra parte, nadie puede decir el día y la hora en que aterrizarán las naves siderales. Sólo el Padre Creador lo sabe. Conchy, Conchy... De todo cuanto hagamos, incluidas las mentiras, tendremos que responder.