AQUEL VIEJO PRESUMIDO
Zapatos blancos y negros para caminar con brillo, y un chaleco colocado con su reloj de bolsillo, Aquel hombre que de viejo su pelo no era sencillo, se lleno de brillantina para seguir su camino, Eran muchas sus premuras de aquel soltero con dichos, y otras tantas sus locuras, hasta quiso ver su nicho. Buscaba novia en su tierra, y a sus sobrinos les dijo, yo siempre quise a mi tierra más quiero un amor muy fijo. Cargado va de razones, sin ningún miedo a vivirlas, en sus nuevas emociones quiso llegar a escribirlas. Caminando con soltura mueve a gusto sus zapatos, no se le nota locura ni vive tiempos ingratos. Presumiendo de su tipo como quien tiene quince años, su cuerpo lanza ese grito que le dejan ciertos daños. Viene buscando dulzuras, no le preocupan los años, espera vivir dulzuras sin encontrar desengaños. Presumiendo con corbata va caminando en la vida, su pasado hoy no le ata ni ve su ilusión perdida. Los vecinos le critican por fabricar ilusiones, y algunos viejos se pican al ver que tiene razones. Pasa tranquilo su calle dejando mil confusiones, algunos ven el detalle de cómo vive emociones. Con un reloj de pulsera que brilla en la lejanía, vive soñando su espera que puede darle alegría. No quiere pensar en muerte ni sufrir enfermedades, el espera de su suerte conocer las vanidades. Una peluca le arregla su pelo tan desbocado, y su esperanza no pliega al verse siempre admirado. Presumiendo de su porte sin mirar quien marcha ha lado, se ha sacado el pasaporte para verse transportado. No se si el tiempo se para, ni se quien se lo ha nombrado, el tiene su vida clara y marcha tan encantado. G X Cantalapiedra.
Zapatos blancos y negros para caminar con brillo, y un chaleco colocado con su reloj de bolsillo, Aquel hombre que de viejo su pelo no era sencillo, se lleno de brillantina para seguir su camino, Eran muchas sus premuras de aquel soltero con dichos, y otras tantas sus locuras, hasta quiso ver su nicho. Buscaba novia en su tierra, y a sus sobrinos les dijo, yo siempre quise a mi tierra más quiero un amor muy fijo. Cargado va de razones, sin ningún miedo a vivirlas, en sus nuevas emociones quiso llegar a escribirlas. Caminando con soltura mueve a gusto sus zapatos, no se le nota locura ni vive tiempos ingratos. Presumiendo de su tipo como quien tiene quince años, su cuerpo lanza ese grito que le dejan ciertos daños. Viene buscando dulzuras, no le preocupan los años, espera vivir dulzuras sin encontrar desengaños. Presumiendo con corbata va caminando en la vida, su pasado hoy no le ata ni ve su ilusión perdida. Los vecinos le critican por fabricar ilusiones, y algunos viejos se pican al ver que tiene razones. Pasa tranquilo su calle dejando mil confusiones, algunos ven el detalle de cómo vive emociones. Con un reloj de pulsera que brilla en la lejanía, vive soñando su espera que puede darle alegría. No quiere pensar en muerte ni sufrir enfermedades, el espera de su suerte conocer las vanidades. Una peluca le arregla su pelo tan desbocado, y su esperanza no pliega al verse siempre admirado. Presumiendo de su porte sin mirar quien marcha ha lado, se ha sacado el pasaporte para verse transportado. No se si el tiempo se para, ni se quien se lo ha nombrado, el tiene su vida clara y marcha tan encantado. G X Cantalapiedra.