Trapicheos empezando el milenio tres, Esperanza Aguirre

Trapicheos empezando el milenio tres
es la tónica del juego sin reglas,
prolifera el cuco y se las arregla
para que el IVA no recaiga en él.

Esperanza, ¡qué palabra! Su merced
ha hecho la gracia al rebelarse
con su sonrisa y magnífica pose
de heroína lideresa en su cuartel.

Como tiene mucho mando en la tropa
resiste y apoya a los del caso Gürtel,
y así descoloca a Rajoy y Zetapé.

También al Zar, aquel de ¡mire usted,
váyasé! Y ese hijo de varios padres
al que por hache o por be, no puede ver.

Y es que, donde hubo clase, hay clase,
marquesa, lideresa o vampiresa
que se niega a recaudar sólo en base
del interés general porque es, esa.

Esa mujer especial tan liberal,
que en aras del bien de su comunidad
y de Ejpaña en general, es incapaz
de mangonear de vender o traicionar.

Como doña Rita, que está en la cremá
haciéndose una mascletá junto a Camps
e intentando, derrumbar a El Cabanyal.

Entretanto, Lolas y Dionisiacos
hacen frases lapidarias y cantos
con sus muchas caras tan reaccionarias.

Sus lemas son: descalificando,
enredando, tergiversando,
distrayendo, despistando e incordiando.
Faratabailes de tres al cuarto,
meapilas aprovechados
que miran hacia otro lado
cuando ven al pederasta
o al verriondo fornicando
o a la beata abortando
a la vez que santiguando.
Hipocresía y maldad,
riqueza sin parangón
obtenida de somatraspon.
SOLIDARIDAD CON GARZÓN.
Salud.