Vale...

Parece ser que San Isidro fue un santo muy milagrero, en temas diferentes relativos al campo, lluvias en primavera, tormenta sin granizo...

El milagro más importante dicen que era continuado.
San Isidro tenía un continuo deseo de orar. Tan grande era que, cuando salía a preparar la tierra comenzaba a arar y. de pronto paraba y oraba durante horas y los ángeles hacían su trabajo.

Vale
Mas o menos